19 de Enero de 2016
La Consejería de Agua, Agricultura y Medio Ambiente de la Región de Murcia, impulsará en Bullas la puesta en marcha de proyectos piloto de recogida selectiva de biorresiduos, atendiendo así la petición de este municipio, según manifestó hoy la directora general de Calidad y Evaluación Ambiental, Encarna Molina, tras reunirse con la alcaldesa, María Dolores Muñoz.
Molina destacó que el Plan de Residuos de la Región de Murcia (2015-2020) “ha incluido medidas para fomentar la recogida separada de materia orgánica mediante la puesta en marcha de proyectos piloto en diferentes municipios, con el objetivo de evaluar el dimensionamiento y los costes que supone la implantación de este nuevo sistema”. La directora general añadió que hay otros ayuntamientos que están interesados en acometer iniciativas similares.
Los biorresiduos son los residuos biodegradables de jardines y parques, los residuos alimenticios y de cocina procedente de hogares, restaurantes, servicios de restauración colectiva y establecimientos de venta al por menor; así como residuos comparables procedentes de plantas de procesado de alimentos. En la actualidad este tipo de residuos se recogen mezclados con otros residuos municipales en los contenedores de fracción resto y son sometidos a un tratamiento de selección que trata de extraer toda la materia orgánica presente con el objetivo de facilitar su compostaje.
Según Encarna Molina, “este sistema se ha adoptado mayoritariamente en los países de la Unión Europea, aunque ha demostrado ser insuficiente, ya que la capacidad técnica de las instalaciones para la separación tiene limitaciones y la materia orgánica obtenida produce un compost con una calidad insuficiente para su aceptación por parte de la demanda de este producto reciclado”.
Recogida selectiva
Por tal motivo, la Unión Europea y el estado español están fomentando la recogida separada de la materia orgánica, tanto de los consumidores domésticos como de otros grandes productores, a través de la Directiva de Residuos, la Ley de residuos y suelos contaminados, y el Plan Estatal Marco de Residuos (PEMAR).
La directora general destacó que las ventajas de una recogida separada se traducen en “una mayor calidad del compost obtenido, con lo que se incrementan las posibilidades de aceptación de este producto en el mercado, incluso para su uso en parques y huertos municipales”. En este sentido añadió que “produce un beneficio directo sobre los suelos ya que, al contar con procesos de selección más eficientes, el producto resultante no tiene en su composición materiales como, por ejemplo, pequeños trozos de plástico o vidrio, que se acumularían en el terreno sin degradarse”.
Comunidades como Cataluña, Asturias, País Vasco o Cantabria han ido implantando este sistema de recogida desde 2008. Otras comunidades están estudiando su implantación, así como entidades locales. En 2012 llegaron a duplicarse las toneladas de biorresiduos recogidas desde 2006. No obstante aún existen dudas sobre algunos aspectos de su implantación, como el incremento de costes que representa, la existencia de una demanda suficiente o la adaptación de las instalaciones de recogida y selección.