14 de Octubre de 2019
Las estructuras plásticas multicapa proporcionan muchas ventajas en su incorporación al sector del envase. Desde la reducción de su peso, con el consiguiente ahorro económico y ambiental en su fabricación y transporte; hasta la mejora de sus propiedades al proporcionar una combinación de funciones como la sellabilidad, estabilidad estructural y térmica, posibilidad de impresión, etc.; y por supuesto sus propiedades barrera que contribuyen a la conservación de los alimentos para garantizar su seguridad y evitar su desperdicio. A pesar de todos estos beneficios, los residuos de los envases multicapa de plástico suponen una gran preocupación medioambiental porque no siempre se gestionan de la mejor manera, siendo aún muy altas las tasas de incineración y vertido.
La separación de las diferentes capas exige nuevas tecnologías o procesos adicionales al reciclado convencional que encarecen el proceso haciéndolo poco viable técnica y económicamente. A esto se suman otras dificultades como la baja demanda actual de plásticos reciclados, que solo representa el 6% de la demanda total de plásticos en Europa, y que en muchas ocasiones se limitan a aplicaciones de bajo valor añadido.
Para dar respuesta a este reto, AIMPLAS, Instituto Tecnológico del Plástico, lidera el proyecto RECIPAM, que cuenta con financiación de la Agencia Valenciana de la Innovación (AVI) y en el que participan ACTECO, UBE, FAPERIN y REPOL con la colaboración de AVEP. Su objetivo es desarrollar nuevos procesos de reciclado para obtener poliamidas (PA) a partir de residuos de envases multicapa para alimentos. Para ello se incluirá un proceso de deslaminación para separar las poliamidas y un proceso de compatibilización para reprocesarlas junto con los otros materiales plásticos de forma que se obtengan compuestos de calidad suficiente.
De esta forma se pretende crear una cadena de reciclado de envases multicapa a través de la involucración y colaboración de toda la cadena de valor mediante la implementación industrial de los procesos de reciclado desarrollados y tras la validación del desempeño técnico y la calidad de las poliamidas recicladas usándolas en sustitución de plásticos vírgenes en aplicaciones de alto valor añadido, tanto en aplicaciones en contacto con alimentos como de otro tipo.
El proyecto contribuirá a resolver los retos definidos por los comités estratégicos de innovación especializados de la Comunidad Valenciana en Economía Circular. Por una parte, contribuirá a la valorización más eficiente de residuos, ya sea mediante la mejora en la separación de los plásticos multicapa como a su posterior valorización a través de reciclado mecánico o mediante pirólisis. Y por otra permitirá ofrecer bienes de consumo más sostenibles al hacer posible el uso de material reciclado en la fabricación de nuevos productos de alta calidad.