16 de Febrero de 2011
El Plan de Gestión de Residuos Urbanos de Galicia 2010-2020, que hoy se publica en el Diario Oficial de Galicia, es un documento vital para Galicia, ya que establece las bases para impulsar la gestión de residuos urbanos hacia un nuevo escenario más sostenible y acorde con la jerarquía de residuos marcada por la normativa, haciendo especial hincapié en la prevención, la valorización de los residuos y la concienciación y participación ciudadana.
El documento del Plan de Gestión de Residuos, así como la documentación relacionada, se encuentra a disposición de la ciudadanía a través de la web de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras.
Prevenir los residuos y promover la reutilización, el reciclaje y la recuperación para reducir el impacto ambiental es uno de los objetivos básicos del Plan de Residuos, en consonancia con la política de residuos de la Unión Europea actualmente vigente, cuyo objetivo a largo plazo es que la UE se convierta en una sociedad del reciclaje que se proponga como objetivo evitar los residuos y utilizarlos como recurso.
En el plan se recoge por primera vez un objetivo cuantitativo ligado a la prevención y valorización. En el caso de la prevención el plan prevé estabilizar la generación en una primera fase y conseguir una reducción del 10% en 2020 de la generación per cápita respeto a 2009 (que se situó en 1,216 kilos por habitante). Además sus objetivos concretan un incremento de la valorización (recuperación de materiales gracias al reciclaje) desde el 10,3% conseguido en 2009 a un mínimo del 30% de valorización material total en el 2020.
Comportamiento ciudadano
Para conseguir estos objetivos es fundamental capacitar a los ciudadanos y modificar sus comportamientos. Por este motivo es imprescindible mejorar el acceso de los ciudadanos a la información y preparar instrumentos prácticos a nivel autonómico o local que permitan a los ciudadanos potenciar los hábitos y actitudes dirigidos a la prevención o a la recogida selectiva. En este sentido, hay que destacar que la primera línea estratégica contemplada en el Plan de Gestión de Residuos Urbanos es la aplicación de políticas de comunicación, una actuación que supondrá una inversión de casi 20 millones de euros.
Esta estrategia parte de la base de que las personas son el factor clave en el modelo de gestión de residuos y que su participación resulta imprescindible para conseguir los objetivos del plan; en este sentido, el plan apuesta por hacer una importante y renovada apuesta por la comunicación a todos los niveles: ciudadanía, productores y comerciantes, entidades locales o gestores. El objetivo general es desarrollar el potencial que tiene la comunicación y la educación ambiental como herramienta fundamental en la gestión ambiental.
Para llevar a cabo esta estrategia, el plan apuesta, entre otras acciones, por el desarrollo de campañas de comunicación para incrementar la información sobre el reciclaje, tanto a nivel general como nos municipios, así como la creación de una nueva línea de subvenciones directas dirigidas a los entes locales y entidades sin ánimo de lucro que desarrollen acciones de prevención y recogida selectiva, principalmente. Según consta en el propio plan, se dará máxima prioridad a aquellas propuestas presentadas que vayan ligadas a proyectos concretos que formen parte de una planificación a medio largo plazo. En este sentido, otra de las actuaciones previstas es incrementar los recursos educativos de temática ambiental en general y en gestión de residuos en especial, para los centros escolares y para los centros dedicados a la educación ambiental, y la educación en el tiempo libre, entre otros.
10 líneas estratégicas
El Plan de Gestión de Residuos Urbanos establece un total de 10 líneas estratégicas de actuación, que implicarán la movilización de 510 millones de euros.
La llamada estrategia de las tres R (reducción, reutilización, reciclaje) se complementará con la valorización energética a través de la actual planta de SOGAMA en Cerceda y el nuevo Complejo de Tratamiento de Residuos Urbanos del Sur. Este último estará destinado a gestionar la fracción de residuos que no puede ser absorbida por el Complejo Ambiental de Cerceda, tratando la mayor parte de los residuos generados en el sur de Galicia.
Los complejos del norte y del sur, junto con la mejora y potenciación de las plantas de tratamiento existentes (Nostián, Barbanza y O Morrazo) y la construcción de 8 nuevas plantas de compostaje, así como el incremento del reciclaje y de la reducción, permitirán que Galicia disponga de un sistema de tratamiento de RSU puntero y uno de los mas modernos de Europa.
Cabe destacar que los sistemas complementarios de gestión de residuos urbanos son los más exitosos en la Comunidad Europea, de modo que los países que más valorizan energéticamente son los que más reciclan y los que menos cantidad de residuos elimina en escombrera.
Red de infraestructuras
La inversión específica en la planificación de la red de infraestructuras previstas en el plan asciende a 417,6 millones de euros, de los que 358,6 se destinarán a nuevas plantas de tratamiento (compostaje y nueva planta del sur) y los 59 millones restantes a la mejora de la capacidad de las plantas existentes.
De esta cantidad, el Complejo de Tratamiento de Residuos Urbanos del Sur supondrá 244,8 millones de euros, pues contará con una planta de valorización energética y una planta de compostaje, además de una planta de selección de envases y otra de selección mecánica autorizada.
Galicia dispondrá de 8 nuevas plantas de compostaje, en las que se invertirán 81,5 millones de euros. Además de la referida planta de compostaje en el complejo del sur, que implicará 22 millones de euros de inversión, se construirá otra en SOGAMA por un importe de 13 millones de euros, y otras seis en localización por determinar que suman un presupuesto de 46,5 millones de euros. A esto hay que añadir otros 11,4 millones en plantas locales y miniplantas, por lo que la apuesta de la Xunta de Galicia por el compostaje ascenderá a más de 92 millones de euros.