8 de Abril de 2011
Un estudiante de Navales y Aeronáutica, Carlos Matilla; un estudiante de Aeronáutica, Gorka Marcos, y un estudiante de Navales, Héctor Cifuentes, forman el equipo Stingray. Integrados en él, estos tres jóvenes de la Universidad Politécnica de Madrid se han presentado a la segunda edición del concurso Airbus Fly Your Ideas, una competición de estudiantes a nivel internacional en busca de las mejores ideas para una aviación más ecoeficiente.
La competición se divide en tres fases. La primera, en la que cada equipo envía su propuesta sobre cualquiera de los 5 pasos en el ciclo de vida de la aeronave: diseño, cadena de suministro, fabricación, operaciones y fin del ciclo de vida del avión. Representantes de Airbus y expertos de la industria seleccionan los proyectos más interesantes que pasan a la segunda fase. En esta ocasión, 84 equipos procedentes de 35 países han sido seleccionados de entre las más de 300 ideas presentadas.
En esta segunda fase se encuentra este equipo de la Universidad Politécnica de Madrid, uno de los cinco equipos españoles seleccionados (el resto provienen de la Universidad Pontificia de Comillas, la Universidad Politécnica de Valencia y ESADE, Universidad Ramón Llull), que se decidirá el próximo 15 de abril. Entonces, se conocerán los 5 equipos finalistas que acudirán al Salón Aeronáutico Internacional de París, Le Bourget, Francia que se celebra en junio de 2011. Allí, presentarán sus ideas y el equipo ganador obtendrá 30.000 euros.
Stingray, participa en la categoría de eficiencia energética, en la subclase de diseño. “Tratamos de buscar una idea innovadora y ecológica que permita abaratar los costes mejorando la relación peso-velocidad del actual transporte aéreo y contaminar menos, llegando incluso a poder no emitir ningún tipo de partículas durante la operación”, cuenta Héctor Cifuentes, portavoz del equipo.
La incógnita de los proyectos
Esto es lo único que pueden explicar sobre su proyecto, pues el concurso exige un cierto nivel de confidencialidad y los ejes en los que se sustenta su idea no pueden ser desvelados por el momento. Aun así y, a pesar de no conocer en qué están trabajando el resto de los equipos, ellos afirman que “los cálculos que estamos realizando son bastante esperanzadores, dándonos una buena ventaja de cara a consolidar nuestra idea y poder representar a la Universidad Politécnica de Madrid”.
Para esta segunda fase cuentan con un mentor académico designado por Airbus para apoyarles y permitirles un mayor desarrollo de los proyectos. María Dolores Sondesa, profesora titular de dibujo del departamento de Infraestructura, Sistemas Aeroespaciales y Aeropuertos de la ETSI Aeronáuticos de la UPM, es la encargada de guiar a los miembros de Stingray. “Los tres están trabajando muy duro, y deseo que su esfuerzo se vea recompensado con el paso a la fase siguiente”, sostiene la profesora.
Creatividad y respeto por el medio ambiente
Charles Champion, vicepresidente ejecutivo de Ingeniería de Airbus y presidente de FYI indicó que “consiguiendo el compromiso de universidades y jóvenes de todo el mundo, podremos continuar estimulando la creación de nuevos proyectos para una aviación más ecoeficiente que equilibre el continuo crecimiento del transporte aéreo y el respeto por el medio ambiente”.
En la edición anterior, celebrada en 2009, los ganadores procedían de la Universidad de Queensland (Australia), y fueron elegidos por su propuesta de utilizar bio-materiales compuestos para la producción de componentes de la cabina de pasajeros de las aeronaves, reduciendo la dependencia de fuentes no renovables. Entre los finalistas se clasificó Big Bang, un equipo de la Universidad Politécnica de Valencia, por su planteamiento de cabina sin ventanas para un nuevo diseño de avión eco-eficiente. Y es que como destaca uno de los eslóganes de la competición “Tus ideas pueden ser nuestro futuro”.