12 de Mayo de 2021
Ángeles Marín Andreu, directora de la Oficina de la Estrategia de la Movilidad del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (MITMA) asegura, en una entrevista concedida al proyecto miciudadatodogas, que la visión del Gobierno es `colocar al ciudadano y las empresas en el centro de la política de transportes. Entendemos la movilidad como un derecho, un elemento de cohesión social y también de crecimiento económico. Esto implica diseñar una política de transportes y movilidad que dé respuesta a sus necesidades reales, de movilidad cotidiana, del día a día´.
Ángeles Marín sostiene que `La Estrategia de Movilidad quiere dar una respuesta, entre otros retos, a la emergencia climática. Es imperativo avanzar hacia una movilidad y un transporte de bajas emisiones, respetuoso con el medio ambiente y con la salud humana. Es un objetivo irrenunciable y, además, requiere acciones rápidas, por lo que debemos ser ambiciosos en su implementación´.
Para ello, la Estrategia de Movilidad aboga `por una parte por avanzar hacia fuentes de energía más sostenibles, y por otra hacia los medios de transporte de menores emisiones. Sin duda, el gas natural tiene un papel importante a desempeñar como combustible de transición, dadas sus menores tasas de emisiones, en aquellos modos o vehículos en los que otras opciones aún no son factibles por no disponerse de la tecnología adecuada, o bien no son económicamente rentables o viables. El transporte pesado de carretera, el ferroviario no electrificado o el transporte marítimo son ejemplos de ello´.
`La participación de los gases renovables y del hidrógeno verde está recogida en tres instrumentos de planificación: la Estrategia de descarbonización a largo plazo 2050, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) para el periodo 2021-2030 y la Hoja de ruta del hidrógeno: una apuesta por el hidrógeno renovable´, destaca la responsable de la Oficina de la Estrategia de la Movilidad del MITMA.