15 de Diciembre de 2020
En los últimos años, la comunidad de Castilla-La Mancha ha experimentado de primera mano la transición energética, incrementando en un 30% sus instalaciones de energía solar fotovoltaica. De hecho, según datos de UNEF, la región aporta el 12,4% de generación de energía renovable del país y es la segunda comunidad autónoma con más potencia solar instalada para el autoconsumo fotovoltaico. Además, este 2020 Castilla-La Mancha ha avanzado aún más hacia un desarrollo más sostenible: el Gobierno manchego ha constituido la Comisión para la Sostenibilidad Energética del Sector Público Regional, con el objetivo de potenciar la transición energética, incentivando el autoconsumo y mejorando la eficiencia energética.
Ante estas buenas noticias, la compañía Otovo, especializada en la instalación de paneles solares en viviendas unifamiliares, ha analizado la amortización de la inversión en un sistema de placas solares en Castilla-La Mancha, demostrando el alto potencial de la región.
Castilla-La Mancha es una de las comunidades autónomas con más horas de luz solar anuales en el territorio español y más irradiación solar, superando los 500 MW. Además, un clima mediterráneo continentalizado y uno de los paisajes más áridos del país, junto con la notable escasez de precipitaciones y los veranos suaves de Guadalajara y algunas zonas montañosas de Cuenca, favorecen el funcionamiento óptimo del sistema fotovoltaico. Si en muchos países de Europa con menos de 1.000 horas de sol al año las placas solares ya son una inversión rentable, los beneficios que se pueden obtener en una comunidad como Castilla-La Mancha -que tiene de media unas 2.688 horas anuales de luz- son prácticamente infinitos.
Las subvenciones y el cálculo de la amortización
La posibilidad de solicitar bonificaciones para la instalación de sistemas de autoconsumo varía según el territorio, incluso en una misma comunidad autónoma. Según el estudio sobre las subvenciones para placas solares realizado por Otovo, las regiones donde aumentan las posibilidades de acceder a bonificaciones (IBI e ICIO) son: Ciudad Real, Puertollano y La Solana con una bonificación sobre el IBI del 50%, Alcázar de San Juan con una bonificación del ICIO de hasta el 75%; Talavera de la Reina con una reducción del 50% sobre ambos, y Guadalajara, que además de una bonificación del 50% del IBI, ofrece una reducción sobre el ICIO de hasta el 95%.
No obstante, teniendo en cuenta las variables anteriores y, en el caso de no contar con ningún tipo de bonificación o ayuda (IBI, ICIO, etc.), la recuperación económica de este tipo de sistemas en Castilla-La Mancha se lograría en 6 años y medio. En comparación con otras zonas con menor irradiación solar, como puede ser la provincia de Lugo donde el periodo de amortización ronda los 11 años, se conseguiría una ventaja de más de 4 años en la recuperación económica de la instalación.
La ventaja de Ciudad Real frente a las grandes capitales europeas
Si miramos hacia fuera de nuestras fronteras, por ejemplo, a Alemania. Se estima que en España tan solo contamos con 10.000 sistemas fotovoltaicos en viviendas frente a 1.600.000 en hogares alemanes, según PV-Magazine. Por otro lado, en España obtenemos de media al año 1600 kilovatios-hora por metro cuadrado de energía solar, mientras que en Alemania tan sólo tienen disponibles 1000 kilovatios-hora por metro cuadrado de energía solar. Sin embargo, en Berlín la amortización de la inversión se realizaría en 11 años si no se cuenta con subvenciones, 4 años y medio más que en Ciudad Real.
Si nos fijamos en Londres, el periodo de amortización llegaría a algo más de 11 años, siendo también 4 años y medio más que en Ciudad Real. Por último, en Amsterdam se tardaría en recuperar la inversión unos 11 años y medio, 5 más que en Ciudad Real.
En los tres casos de las capitales europeas, la amortización de la inversión alcanza los 11- 11 años y medio, lo que significa un 7-8% de rentabilidad frente al 15% de Ciudad Real.
Amortizar una instalación de autoconsumo con las mayores bonificaciones
En el caso contrario, si se contara con las mayores bonificaciones que Castilla-La Mancha ofrece (ICIO con una reducción del 95% del impuesto e IBI al 50% durante 5 años), la inversión se amortizaría 4 años después de la realización de la instalación.