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SOSTENIBILIDAD
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2 de Marzo de 2012
En el reciclado de residuos de envases de alimentos, para producir envases nuevos, el sector está empezando a desarrollar envases que incorporan alrededor del 25% de material plástico reciclado.
Los residuos de envases, procedentes del consumo de productos agroalimentarios, suponen un 30% en peso y un 50% en volumen de los residuos urbanos generados en España. Uno de los mayores retos medioambientales en la actualidad, es la gestión y reciclado de dichos residuos.
El sector de envases para alimentos, consciente de esto, está comenzando a desarrollar envases utilizando en parte de su composición plástico reciclado. En ese sentido, actualmente se está logrando incorporar al envase, sobre todo en el sector de bebidas, alrededor del 25% de material reciclado.
Ainia Centro Tecnológico, a través del proyecto Eco-Regrind, estudia mejorar las propiedades de los plásticos que incorporan una proporción de material reciclado, así como su proceso y tratamiento para su empleo en la fabricación de envases nuevos, logrando una mejora de los aspectos funcionales y medioambientales del envase final.
El objetivo, según apunta Esther García, miembro del departamento de tecnologías del envase de Ainia, es conseguir que el envase que incorpora contenido de material reciclado, sea capaz como mínimo, de igualar en calidad y propiedades al envase fabricado empleando únicamente plástico virgen.
En el proyecto, se han estudiado las propiedades de los materiales plásticos que incorporan en su contenido material reutilizado. A lo largo de 2012, se validará el comportamiento del material y el envase final, comparado con el de los envases que no utilizan plástico reciclado, y nuevas aplicaciones de los mismos según las características logradas.
Asimismo, con el fin de evaluar el comportamiento medioambiental, se realizará un estudio para comparar el empleo de un material que incorpora una proporción de plástico reciclado, frente al empleo de un plástico tradicional.
Eco-Regrind tiene una duración de dos años y cuenta con el apoyo del IMPIVA, a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional.
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