14 de Noviembre de 2012
La cámara autonómica ha dado ayer el visto bueno a las enmiendas presentadas al Proyecto de Ley de medidas urgentes para la reactivación económica en materia de industria y energía, nuevas tecnologías, residuos, aguas, otras actividades y medidas tributarias, encaminadas a favorecer la reducción de costes y tasas en materia de residuos y ayudar al sector empresarial de la isla.
Las enmiendas presentadas por el PP, a instancias del Consell de Mallorca, posibilitarán la importación de Combustible Sólido Recuperado (CSR) de países de la Unión Europea en Mallorca a partir del año que viene. Esta medida, impulsada por el departamento de Medio Ambiente del Consell de Mallorca, permitirá hacer eficientes las instalaciones de Son Reus, posibilitando la contención del precio de la tasa en 2013.
La aprobación de esta enmienda supone la creación de un marco legal autonómico, que deberá ser recogido en el Plan Director Insular de Residuos Urbanos.
Se estima que en 2013 llegarán a la isla 100.000 toneladas de CSR, un material que ya se está importando en Mallorca para su uso industrial. De este modo, se prevé equilibrar la capacidad de la planta, con cabida para tratar 730.000 toneladas, de las cuales sólo se llega de media a las 500.000 aproximadamente.
El Combustible Sólido Recuperado es un producto derivado de tratamientos mecánico-biológicos, que les confieren propiedades estables, independientes de los residuos de los que proceden, con un alto poder calorífico y que permite, por tanto, su incineración con aprovechamiento energético en las plantas de incineración como Son Reus.
La producción de esta electricidad, considerada en un 50% renovable, supondrá el ahorro de 20 millones de euros en combustible y primario, y dejar de emitir 270.000 toneladas de CO2 de efecto invernadero que ahora producen carbones y gasóleo.
Las operaciones de traslado y tratamiento de CSR están reguladas por normativas específicas a nivel europeo que aseguran el cumplimiento de las especificaciones exigidas por la UE. Su importación se ajustará a todas las directivas y controles exigidos, y sólo se autorizará el tratamiento de aquellos que cuenten con el certificado reglamentario que garantice que han superado las especificaciones de calidad y sostenibilidad. La autorización será objeto de revisión cada año por parte del Consell de Mallorca.
En estos momentos, la institución insular y la concesionaria han mantenido contactos con varias ciudades de Inglaterra, Irlanda y el norte de Italia y se está a la espera de cerrar las negociaciones.
La actividad económica que se generará con la importación de CSR revertirá positivamente al tejido empresarial de Mallorca generando unos ingresos de 14 millones de euros y 345 puestos de trabajo.
Paralelamente, las enmiendas aprobadas incorporan diversas bonificaciones en materia de residuos. Se establecen así reducciones de hasta un 50% en la tasa de derribos y demoliciones para las entidades locales, a fin de reducir los vertederos incontrolados y ayudar a los ayuntamientos en su tarea de limpieza y control; se crean tasas específicas por residuos como los cárnicos para los productores, los cuales dispondrán de bonificaciones de hasta un 70%, y se fijan tarifas para los lodos y la materia orgánica que actualmente se tratan sin ningún coste en la planta de Son Reus.
Las enmiendas introducen, igualmente, una serie de medidas para facilitar el tratamiento de escorias con el fin fomentar la rehabilitación espacios medioambientales degradados como las canteras, y contribuir a una regeneración sostenible y equilibrado de estos lugares.
El Consell de Mallorca apuesta así por medidas eficientes y eficaces con el objetivo de favorecer la recuperación económica y sostenible de la isla, y evitar nuevas cargas tributarias a los ciudadanos.