24 de Febrero de 2014
El Instituto Tecnológico del Plástico, Aimplas, en colaboración con Acciona Infraestructuras, la Dirección General de Carreteras de la Comunidad de Madrid y bajo la coordinación de la Universidad de Cantabria, ha logrado obtener una innovadora mezcla asfáltica más resistente y sostenible que las convencionales gracias a la incorporación de residuos plásticos en su fabricación. Producto de la investigación se ha creado un asfalto a cuya composición se han añadido diferentes tipos de residuos como neumáticos fuera de uso (NFU), tapones de polipropileno, envases de polietileno y perchas de poliestireno, para asfaltar un total de dos kilómetros de un tramo de la M-300 en los accesos a Alcalá de Henares (Madrid).
Tras estudiar el comportamiento del tramo de carretera asfaltado durante los últimos 18 meses, los socios del proyecto Polymix han llegado a la conclusión de que las nuevas mezclas asfálticas no solo cumplen con los requisitos establecidos en el pliego de prescripciones técnicas para ser utilizadas en la construcción de carreteras, sino que además, las mezclas que incluyen residuos poliméricos en su composición obtienen una mejora notable en la resistencia a las deformaciones plásticas con respecto a la mezcla asfáltica convencional, lo que permite que tengan un mejor rendimiento frente a la aparición de roderas, especialmente importante con altas temperaturas o tráfico pesado lento.
Además, se produce un aumento generalizado de la rigidez sin comprometer, o incluso mejorando como en el caso de los NFU, su comportamiento a fatiga. Estas propiedades mecánicas convierten a las mezclas Polymix en una capa de rodadura que soporta mayores cargas del tráfico mejorando la capacidad estructural del firme. Asimismo puede comprobarse en los ensayos de rodadura, como las mezclas Polymix aumentan significativamente la resistencia frente a las deformaciones plásticas frente a la de referencia. En el caso del polipropileno (PP) prácticamente dobla el resultado.
En los casos de NFU y PP el estudio de viabilidad técnica y económica concluye que gracias a estos novedosos componentes, las mezclas podrían fabricarse con un menor espesor gracias a sus propiedades mejoradas reduciendo de esta forma el coste de producción.
La utilización de un asfaltado alternativo al convencional como el desarrollado en el proyecto Polymix, presenta múltiples ventajas tanto para el medio ambiente como para la economía. Por un lado, hace posible reducir el volumen de materia prima empleada en su fabricación, como los áridos naturales, y por otra proporciona nuevas vías de reutilización para grandes volúmenes de residuos plásticos a través de un método sencillo que se puede incorporar a cualquier planta asfáltica.
De esta manera, si su implantación se extendiera a todo el territorio nacional los residuos se podrían consumir prácticamente donde se generan. Además, los análisis de ciclo de vida llevados a cabo confirman que gracias a la incorporación de residuos poliméricos se obtienen unas carreteras más sostenibles con un menor impacto ambiental.
Los resultados del proyecto Polymix, que ha sido financiado con fondos europeos a través del programa Life+, han sido medidos mediante una serie de ensayos de monitorización realizados por el Centro de Experimentación de Obras Públicas (CEDEX) del Ministerio de Fomento.