21 de Enero de 2016
Con este Observatorio se pretende disponer de una herramienta de trabajo que permita realizar un seguimiento continuado de la generación de residuos, con criterios unificados y con sistemas informativos modernos, transparentes y participativos, en el que todos los interesados tengan representación y se adopten soluciones que puedan ser diseñadas y llevadas a la práctica en común. Se trata de gestionar de manera eficiente los residuos y alcanzar así los objetivos de las directivas europeas en cuanto al fomento de la economía circular.
`El sistema lineal de la economía actual: extracción, fabricación, utilización y eliminación, ha alcanzado sus límites. Se empieza a vislumbrar, en efecto, el agotamiento de una serie de recursos naturales y de los combustibles fósiles, así como el agotamiento de infraestructuras y vertederos actuales, por lo que urge tomar decisiones y desarrollar nuevos modelos de gestión de residuos que nos permitan avanzar hacia una economía circular, hacia un nuevo modelo de sociedad en el que la prevención de residuos y la optimización de los recursos sea uno de sus principales objetivos´, ha dicho el Diputado de Medio Ambiente José Ignacio Asensio.
Asensio ha asegurado que los objetivos de reducción de residuos que se fijan desde Europa son ambiciosos pero factibles. Así, la meta establecida en el Plan de Gestión de la Diputación, prevee que en 2030 la tasa de Residuos Sólidos Urbanos sea del 70%; la tasa de reciclaje de envases no sobrepase el 80% con objetivos intermedios del 60% en 2020 y del 70% en 2025; e impulsar un auténtico mercado de materias primas secundarias recicladas de alta calidad. Asimismo, se pretende limitar la incineración para el año 2020 estrictamente a los residuos no reciclables y no bideogradables, así como reducir obligatoria y progresivamente el vertido de residuos en tres etapas (2020, 2025 y 2030) hasta la prohibición total del depósito en vertederos. `Nuestro objetivo irrenunciable es el de vertederos cero´, ha insistido.
Ha afirmado que las Instituciones deben dar respuesta a la `altísima´ conciencia que tienen los guipuzcoanos sobre la necesidad de separar las facciones de residuos en origen y sobre la recogida selectiva, impulsando las infraestructuras que contribuyan a la prevención, segregación, reciclaje y tratamiento de la fracción rechazo de los residuos y que sustituyan a la actual deposición en vertederos.
En este sentido, ha explicado que su Departamento está trabajando en la creación de un Órgano de colaboración que impulse el reciclaje y en el que participen junto a la Administración, la industria, la universidad y los centros tecnológicos con el fin de estimular la simbiosis industrial, convirtiendo los subproductos de una industria en materias primas de otra, incentivar que salgan al mercado productos más ecológicos y apoyar la recuperación y el reciclado.
`Avanzar hacia una economía verde es una obligación ética y de solidaridad con nuestros descendientes, pero también es una oportunidad económica de futuro, de crecimiento y de empleo. Muchas industrias han dado grandes pasos en los últimos años, pero hemos de ir más allá y buscar las buenas prácticas, las sinergias y la cooperación´, ha resaltado José Ignacio Asensio.
Asimismo, ha afirmado que la Diputación dotará a Gipuzkoa de las infraestructuras necesarias para la valorización energética de la fracción resto de los residuos frente al depósito en vertedero. Y para ello, se construirá el nuevo Centro de Gestión de Residuos de Gipuzkoa. El nuevo centro nace con la vocación de ser un complejo medioambiental donde tenga cabida el tratamiento de la fracción resto para la obtención de energía y calor, así como las futuras instalaciones de biometanizacion para el tratamiento del biorresiduo y las plantas de tratamiento de escorias. `El nuevo centro será, sin lugar a dudas, un referente de cara al desarrollo de futuras soluciones tecnológicas y nuevos eco-productos´, ha señalado.
`En los países del norte de Europa la valorización energética ya no forma parte del debate político, porque entienden que la gestión de residuos les permite obtener ventajas adicionales como electricidad y calor. Estos países nos demuestran que la valorización energética de los residuos, no solo nos permitirá dar una respuesta a la complicada situación actual de los residuos, sino que contribuirá al cumplimiento de los objetivos contra el cambio climático fijados en la Cumbre de París´, ha concluido.